Es mi cielo azulado del alma
aunque discreta ella actúa
va volando derecha con una causa cúbica
que engendra delirios que sostiene en la vida
que detiene tu alma porque en sus alas encumbra ...
Es presente en los deseos fastuosos de la bondad tuya
en un deleite continuo se sostiene
la presencia que transforma todo
lo que la boca derrama en un giro mezquino
se aquieta la gracia de dar en su vuelo
la necesidad humana de estar contigo...
Tan claro es el agua que desdice y tan clara el agua mía
que no le quedan latidos para enmancipar la dicha
de ser espíritu valiente desde aquí hasta el oriente
dejando una clave secreta que se esfuma ...
La permanencia aquella de dejar huellas desiertas
es un tesoro que acumula la bendita llamada
del cielo maravillado con la amada felicidad ...
Ser tan simples no cuesta tanto
es el receptor quien insiste
en comprender aquello que no ve
con el infinito suspiro del Edén ...
El amor a las cosas inexistentes permanece intacto
en la naturaleza breve
en el vuelo de tus aires las semillas
en esta noche clara llena de aires febriles
por tener la música clásica de tus ojos abiertos al fin ...
Enamorada del amor presente
de los pasos del mar ausente
que llega en horas pasadas,
como espuma blanca que enciende
el fuego quimero de tus auras vivas ...
Ay, Detenerse quien pudiera ...
quien pudiera sostenerse ...
En un clamor suficiente
humano ante la adversidad.
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